Siente la misma sensación que si estuvieras en un río o un lago, báñate sin ningún tipo de añadido químico.
Hay multitud de cualidades a favor del lago de baño: la limpieza del agua tiene lugar de forma natural y biológica, sin agregar cloro u otros productos químicos, se mantiene un agua limpia durante todo el año, no es necesario cambiarla, solo reponer las pérdidas por evaporación y la integración en el paisaje es máxima, como si la lámina de agua hubiese estado siempre en el lugar.
Construimos un sistema natural para el disfrute, práctica de deporte, juego o relajación…, siendo los costes de mantenimiento considerablemente menores que los de una piscina química de tamaño similar.
La superficie dedicada al biofiltro es la más reducida, comparada con otros sistemas de depuración similares, pudiendo adaptarnos a pequeñas superficies de terreno.
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